Honestidad, es una virtud que respeta la verdad y por ello nuestro actuar es consistente con nuestro discurso. Hacemos lo que decimos y decimos lo que hacemos. Y responsabilidad, es una manera de ser y de trabajar que se caracteriza por honrar siempre los compromisos, asumir las consecuencias de las decisiones y reconocer modestamente los errores para corregirlos.